La Delegación Episcopal de Catequesis publica un protocolo para este curso

Publicado el 18/09/2020
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La Delegación Episcopal de Catequesis publica un protocolo para este curso

Entrevista al Delegado Episcopal de Catequesis, Manuel Alonso 

El protocolo establece tres claves fundamentales para la catequesis.

Sí, hemos querido destacar tres cosas. Lo primero es que hemos vivido un tiempo de confinamiento y no nos ha quedado más remedio que permanecer encerrados en nuestras casas, pero la fe es comunitaria y tenemos que volver a la parroquia. Este es el mensaje principal que yo quiero destacar más: hay que volver a la parroquia, y tener nuestra presencia allí, frente a otro tipo de catequesis virtuales que tuvimos en su momento porque entonces era necesario, pero ahora hay que volver.

Después, tenemos que ser conscientes de que este es un tiempo que podemos aprovechar, con grandes posibilidades, y por ello es importante el acompañamiento, a los catequistas y a los catecúmenos, incidiendo en un acompañamiento personal y comunitario.

Finalmente, señalamos que es importante utilizar los materiales propios que la Conferencia Episcopal Española pone a nuestro servicio, pues, además, dentro de ellos hay actividades que se pueden hacer en casa, y los padres pueden acompañar a sus hijos a realizarlos.

Manuel Alonso, Delegado Episcopal de Catequesis

El primer punto en el que profundiza el protocolo es en los espacios. ¿En qué lugares deben tener las catequesis presenciales los niños?

En el protocolo indicamos que las catequesis han de realizarse en lugares amplios y ventilados, donde tenemos que respetar las medidas de seguridad y de higiene (los geles, las mascarillas, el metro y medio), y la limpieza (aunque ya se cuida mucho ese aspecto en nuestras iglesias). Además, hay que cuidar las entradas y salidas del grupo, para que los niños no se junten unos con otros y hay que hacer grupos estables, para que, si se da algún caso de coronavirus, podamos aislar ese grupo en concreto.

También las parroquias con mayor número de niños tendrán que hacer un esfuerzo para distribuir las catequesis a lo largo de la semana y así, no juntar a todos los niños a la vez el mismo día.

Los tiempos y los grupos merecen un punto aparte también. 

Todo depende del tipo de parroquia, rural o urbana, pero la clave, como he dicho, es la presencialidad. Esto es lo que tenemos que acentuar.

Dependiendo de la parroquia, a lo mejor hay que hacer una oferta quincenal, para poder ir a misa pero no todos a la vez. En mi parroquia, por ejemplo, tenemos 150 niños en catequesis, no los podemos juntar a todos a la vez, por lo que hay que pensar en una manera de que puedan ir.

El espacio de la catequesis, además, ha de ser restringido: que entren los niños y los catequistas nada más, porque normalmente entran padres o abuelos, pero ahora no puede ser.

Por otro lado, el protocolo está hecho para la presencialidad. Pero es verdad que nos podemos encontrar que en cualquier momento haya que interrumpir la catequesis, o bien un grupo de la parroquia porque haya casos positivos, etc. Pero hay que pensar y prever cómo cuidamos de los niños durante esos días en casa, cómo les acompañamos a ellos y cómo les acompañan los padres.

¿Por qué recomienda especialmente los materiales de la Conferencia Episcopal Española?

Recomendamos especialmente los catecismos que ha ido editando la CEE: “Mi encuentro con el Señor” para los más pequeños, “Jesús es el Señor” para la etapa de la Primera Comunión y “Testigos del Señor” para los más mayores. Este material es interesante utilizarlo porque hay mucho material en redes, actividades interactivas, vídeos, etc. Además, recordamos que el material escolar que hay en la parroquia también han de ser de uso privado, y si se usa, ha de ser desinfectado.

Las familias y los catequistas también tienen un hueco especial.

Creemos que este es un tiempo privilegiado para el acompañamiento, y, por ello, los sacerdotes tenemos que cuidar a los catequistas y a las familias. Estos días la gente está mucho más sensible y necesita nuestra cercanía, que estemos atentos a ellos, disponibles para hablar, para comunicarnos.

En cuanto a los catequistas, les pedimos que pongan mucha atención para cumplir y hacer cumplir las normas. También hemos establecido que en cada parroquia haya un catequista responsable de este protocolo, para que nos informe ante cualquier eventualidad.

Nosotros podemos aconsejarles sobre cómo actuar. 

A las familias, por su parte, les rogamos que tengan paciencia, porque es una situación difícil, y han de tener claro que la iglesia es un sitio muy seguro, limpio, donde podemos estar y disfrutar de la catequesis y de los sacramentos. Además, les pedimos que colaboren en el cumplimiento de las normas, que no envíen un niño que tenga fiebre y que se comprometan a echarnos una mano cuando se interrumpa la catequesis, para que se pueda hacer de modo virtual. El protocolo completo puede consultarse en la página web  www.catequesisasturias.com.

Consulta aquí el protocolo