Inscripción consecratoria de la antigua iglesia de Santo Tomás de Baones. Siglo X d. C.
La iglesia parroquial de Santo Tomás, en Gijón, permaneció en Baones hasta mediados del siglo XVII cuando debido a su estado de ruina se trasladó a la nueva iglesia construida en Granda. Este nuevo templo fue reconstruido en 1908, en estilo neogótico, destruido durante la guerra civil y reconstruido nuevamente en 1939, reabriéndose al culto en el año 1947.
La lápida fue encontrada en el siglo XVIII entre los cimientos de la antigua iglesia de Baones, y a principios del siglo XX se encontraba en la capilla de San Antonio, en Castiello, de donde fue trasladada en 1979 al Museo Jovellanos de Gijón. Al cumplirse en 1993 el milenario de la consagración de la iglesia, fue trasladada a la actual iglesia de Santo Tomás y ubicada en el pórtico por su entonces párroco, D. Celestino Granda.
Se trata de una pieza de extraordinario valor arqueológico que ofrece valiosa información sobre la consagración del templo y sus reliquias. El texto se desarrolla en la cara frontal y en el lado derecho de un bloque prismático de piedra caliza de 84,5 cm de largo, 25 cm de altura y 52 cm de fondo.
“En el nombre del Señor fue consagrado este templo por el señor obispo Gudesteo, por mandato del señor príncipe Bermudo hijo de Ordoño en las nonas de febrero de la era de 1031 [año 993]. Están escondidas aquí las siguientes reliquias: de la cruz del Señor…”
El texto alude a la fecha de consagración del templo, no a la de su construcción que pudo ser anterior, puesto que la consagración es un ceremonial que puede tener lugar posteriormente. En el costado derecho -incompleto-, se describen las reliquias depositadas de las que únicamente se lee la de la “Cruz del Señor”.
La inscripción menciona al obispo Gudesteo, al frente de la diócesis de Oviedo entre 992 y 1008, y al futuro rey Bermudo II (952-999), quien el año anterior a la consagración (992), habría donado “in villa Vadones ecclesiam Sancti Thome”.
Está datada con la fórmula de la Era Hispánica, por lo que hay que restar 38 años a la fecha (1031) para obtener el año según la cronología cristiana (993 d. C.).
Durante los meses de marzo a mayo de 2022 el epígrafe fue cedido temporalmente por la parroquia para su exposición en el Centro de Cultura Antiguo Instituto Jovellanos, en el marco de la Exposición: Herencias. Patrimonio arqueológico de Xixón, promovida por el Ayuntamiento de Gijón.
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