Este domingo, 14 de diciembre, se celebrará en el templo milenario de Santa Eulalia de Abamia, en la Unidad Pastoral de Cangas de Onís, la misa bajo el rito mozárabe, la antigua liturgia latina con la que se celebraba en España entre los siglos V y XI. Para poder celebrar bajo este rito es necesario contar con un permiso especial, algo con lo que cuenta el sacerdote que presidirá esta eucaristía, Gaspar Muñiz, actualmente párroco de Pravia. Hablamos con él sobre este rito, qué supone, qué diferencias hay con la actual liturgia y cuándo se lleva a cabo.
¿Qué tiene de especial la liturgia en el rito mozárabe?
Como todas las liturgias antiguas son muy antropológicas, muy vinculadas a la persona y muy participativas en cierto sentido –hay más de cincuenta intervenciones de la Asamblea, por ejemplo–, pero también es muy exótica porque sobre todo son liturgias donde se quiere hablar de Dios desde el punto de vista de la belleza. Todos los colores, los olores, las palabras que se utilizan, todo está enfocado a mostrar la belleza del misterio de Dios. Es muy diferente del rito romano ya que éste siempre fue mucho más sobrio, más conciso, que busca también una belleza pero siempre desde la sobriedad. Aquí es al revés, siempre desde la exuberancia, el buen gusto y sobre todo muy sensorial.
¿Qué vinculación especial tiene con Oviedo?
Oviedo fue sede del rito mozárabe o hispánico durante mucho tiempo, no solo porque se celebrara, además de una forma bastante peculiar, sino porque además en la época de la invasión agarena también tuvimos aquí la suerte de conservar manuscritos y formularios de celebración de la eucaristía. De hecho, es más que sabido y probado que las poquísimas rúbricas que se conservan de este rito, la inmensa mayoría fueron escritas y redactadas aquí en Oviedo porque era el lugar donde se conservó y se preservó de la invasión y luego desde aquí se expandió otra vez al resto de España. Podemos decir que, en cierta manera, Oviedo fue el refugio y también el difusor de este rito.
Santa Eulalia de Abamia
La música tiene un papel muy especial.
Sí, se canta mucho. Es un rito muy cantado. Hoy por hoy no lo cantamos todo porque si no la misa se prolongaría muchísimo. Pero sí que es verdad que se canta mucho, con un sonido muy parecido al Gregoriano porque es de la misma época más o menos, entonces es muy monódico, también muy modal. Es muy bonito, con melodías propias.
¿Por qué no está permitido que todos los sacerdotes puedan celebrar bajo este rito en concreto?
Puede pensarse que el rito es llegar, leer un libro y hacer unos gestos, pero no es así. Para meterse dentro de un rito hay que tener una capacidad un poco más extraordinaria, digamos, de estudio, de conocimiento. Es necesario saber el por qué y el para qué de muchas de las cosas que se hacen, puesto que de lo contrario estás haciendo una obra de teatro y no te estás metiendo dentro. Por eso es una cosa muy selectiva en ese sentido y también porque es muy complejo. La misa no se parece en nada a la nuestra. No empezamos con la señal de la Cruz, de hecho no hay signaciones, la paz se da antes de empezar la anáfora, las ofrendas, por ejemplo, sí son llevadas al altar por los fieles directamente. Hay un montón de cambios, es muy diferente. Por poner un ejemplo, para conducir tú tienes que saber un código de circulación y basta, no te preguntas por qué el verde es para pasar y el rojo no. Bueno, pues en la liturgia se necesita saber mucho más que simplemente qué son los colores, sino conocer el por qué, el cómo y el cuándo. Y claro, cuando cambias el rito hay que cambiar también de mentalidad y supone un esfuerzo bastante grande.
En nuestra diócesis, ¿cuándo se celebra la misa en este rito?
Cuando estaba aquí la comunidad cisterciense se celebraba una vez al mes en Valdediós. Luego pasó a celebrarse una vez al año, también en Valdediós, con la fiesta de Santa María, la del 18 de diciembre, que alguna vez presidió también don Jesús, al menos en dos o tres ocasiones, que yo recuerde. Luego ya se perdió, ya que yo me fui a Roma y celebraba en Roma, no aquí. Y bueno, ahora que llegué, como me enviaron a Pravia, y en Pravia está la iglesia palatina de Santianes de Pravia, pues allí, por ejemplo, en mi toma de posesión, como el rito pide que se rece por los difuntos, pues hice un responso regio en rito mozárabe a los reyes Silo y a Adosinda, que por cierto son los que trajeron los restos de Santa Eulalia a Asturias. También en torno a la fiesta del titular, san Juan Evangelista, celebramos por el rito Mozárabe casi todos los años en Santianes. En esta ocasión, por ejemplo, nos unimos a la iglesia de Abamia ya que nos lo pidió el párroco, don Diego, porque además en Abamia, como todo el mundo sabe, estuvo el primer sepulcro del rey Pelayo y su esposa Gaudiosa, hay un vínculo muy importante del rito con la historia, con la comunidad, con ese pueblo, con esa iglesia. Me parecía que podía ser algo muy educativo y catequético para sus fieles y además una forma diferente de acercarnos al misterio que celebramos.
Dentro de España, sí que es más habitual en otros lugares.
Sí, sí. Somos nosotros, en el norte, los que estamos estamos un poco más sobrios en este sentido. Se celebra muchísimo en Madrid, mucho más que en Toledo, imagínate. Se celebra también mucho en Alcalá, en Zamora y en Salamanca también se celebra con mucha solemnidad y muy bien hecho. En realidad está cada vez celebrándose más en este venerable rito, pero bueno, en Asturias en ese sentido nuestra forma de ser es un poco más sobria y aquí por ejemplo se celebra menos, pero que tampoco noto yo que es que sea una falta de interés, más bien, bueno, quizás porque ese más desconocido. Al final en Castilla este rito es mucho más conocido porque es mucho más fácil acceder a él. Aquí no tanto.
Este domingo será en la parroquia de Abamia, ¿cuáles serían las siguientes?
La siguiente va a ser a finales de mes, el sábado 27 de diciembre. Será la celebración en honor a San Juan Evangelista en la iglesia de Santianes de Pravia, como todos los años.
