Con el repentino fallecimiento del Papa Francisco la agenda diocesana sufrió diversos cambios, y entre otras citas, se cancelaron encuentros que estaban programados para celebrar el Año Jubilar de la Esperanza, como el encuentro que las Delegaciones de Catequesis, Enseñanza, Familia y Vida habían fijado para el sábado 26 de abril, y que se anuló al coincidir con el funeral del Santo Padre en el Vaticano. El encuentro habrá de reprogramarse, más adelante.
Pero las diferentes realidades diocesanas continúan organizando sus encuentros y el próximo 10 de mayo, sábado, será el turno de las Cofradías de nuestra diócesis. Ese día, los cofrades que participen saldrán a las cinco y media desde la parroquia de San Isidoro El Real, en la Plaza del Ayuntamiento en Oviedo, con la imagen de Nuestra Señora de la Esperanza, conocida popularmente como la Balesquida, y partirán en procesión hasta la Catedral, con el rezo del Santo Rosario. Una vez allí, a las seis y media de la tarde se celebrará la eucaristía jubilar, para concluir la jornada al finalizar trasladando la imagen hasta su capilla, en la misma Plaza de la Catedral, con el canto de la Salve.
«Un acto al que están invitados todos los cofrades de Asturias, pero por supuesto, al que son bienvenidos y animamos también a participar a todos los devotos», afirma Luis Manuel Alonso, Delegado episcopal de Piedad Popular.
Los cofrades asturianos cuentan con una cita anual en la que se reúnen para conocerse y poner en común los diferentes aspectos que a todos les atañen, y es el Encuentro diocesano de Cofradías, que este año concretamente tuvo lugar el pasado mes de octubre, en Gijón. Por tanto, este segundo encuentro en el año es una ocasión excepcional que se organiza con motivo de este Año Jubilar 2025.
La realidad de las Cofradías y los cofrades en nuestra diócesis es una realidad creciente, que «se va consolidando, a la que se va incorporando gente joven, tan necesaria para que se produzca el relevo generacional», explica Luis Manuel Alonso.
