160 personas, cuatro autobuses, son los que este año han partido desde diversos puntos de Asturias (Oviedo, Gijón, Turón, Blimea, Pola de Siero o Colunga) hasta Lourdes, en la peregrinación que cada año organiza la Hospitalidad en nuestra diócesis. El viaje daba comienzo el pasado lunes, 12 de mayo, y finalizaba este mismo viernes, día 16.
A lo largo de estos días los peregrinos, entre los que se encontraban personas enfermas, voluntarios y sacerdotes, pudieron participar de las diversas celebraciones que tenían lugar en el Santuario, como la eucaristía internacional o la procesión de las antorchas. «Han sido días muy intensos, la verdad. Estamos cansados lógicamente porque madrugamos mucho y el día da para mucho poco, porque queremos hacer tantas cosas que se nos pasa el tiempo volando», explica Macu Canal, Secretaria de la Hospitalidad. «Los miembros de la Hospitalidad somos ya casi como una familia, aunque siempre se va añadiendo gente nueva, pero se crean lazos muy fuertes entre nosotros porque lo que vivimos aquí son experiencias que nos unen mucho», afirma, explicando que «rezamos juntos, y sentimos que nuestra Madre de Lourdes nos acoge, y la imagen de Santa Bernardita nos recuerda que estamos al servicio de los demás».
