Este próximo 6 de agosto se cumplirán los diez años de la invasión del grupo terrorista Estado Islámico a la Llanura de Nínive, en el norte de Irak, en la que 100.000 cristianos fueron obligados a huir por negarse a renunciar a su fe. Era la primera vez en la historia, desde el siglo I, en que había desaparecido por completo la presencia cristiana en la zona. Tal y como informa Ayuda a la Iglesia Necesitada, los cristianos van regresando lentamente y diez años más tarde, en Nínive, de las 13.200 familias cristianas que había registradas en el 2014, han vuelto 9.000 y en Qaraquosh (la principal ciudad cristiana de Irak), donde antes había unos 50.000 cristianos, ahora han regresado unos 25.000.
Procedente de aquella ciudad y precisamente coincidiendo con estas fechas, el cáliz de Qaraquosh ha vuelto de nuevo a nuestra diócesis, y está visitando diferentes parroquias. Fue profanado por el Estado Islámico en el año 2014 y donado por la Iglesia católica Siria a la Fundación Pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada, que tiene como encargo ayudar a que recorra el mundo recordando la persecución a los cristianos de nuestros días.
Así, los días 1 y 2 de agosto estará en la parroquia de San Félix de Lugones y en la capilla de Nuestra Señora del Buen Suceso.
El 3 y 4 de agosto visitará Granda, Caldones, Lavandera y San Julián de Roces, en Gijón.
El 9 de agosto estará en la parroquia de San Martín de Turón.
Los días 10 y 11 de agosto, en el Santuario de Nuestra Señora de El Remedio y las parroquias de Nava, Tresali, Cuenya y Ceceda.
El 15 de agosto, estará en San Isidoro El Real de Oviedo.
El 18 de agosto en Navelgas, Naraval y Paredes.
El 22 de agosto en la Basílica del Sagrado Corazón de Jesús.
El 25 de agosto, en Ruenes, Alles y Panes.
Finalizará su recorrido los días 31 de agosto y 1 de septiembre, en la parroquia de San José de Gijón.
